- 33 cl de aceite de oliva
- 85 grs de azúcar
- 2 cucharadas mantequilla
- 2 huevos
- 1 limón grande
- 6 cucharadas de leche
- 5 grs de esencia de vainilla
aproximadamente
- 5 grs de canela
- 1 sobre de royal
- 700 a 800 grs de harina
aproximadamente
Elaboración:
Se coge un recipiente y se pone en el
fuego con el aceite y una cáscara de limón, o un cuscurro de pan, se fríe y se deja enfriar. Luego, en un recipiente, se vuelca el aceite y se bate muy bien. Después se va echando
la leche, el azúcar, la mantequilla, la canela, la vainilla, la
raspadura de un limón y un vaso pequeño la mitad del zumo del limón, la levadura
y los huevos. Se bate todo muy bien. Una vez mezclado, se va
añadiendo la harina poco a poco, formando una masa se va amasando
hasta que se despegue de las manos. Esta masa se deja reposar unas 2 horas, cubriéndola con un paño.
Pasado ese tiempo, en una encimera, se espolvorea la
harina y se extiende la masa con el rodillo. Con un cuchillo se va
cortando la masa en forma de cuadrados de medio centímetro de grosor, y se le
hace unas las rallas verticales en la parte de arriba.
Se ponen al horno a 180 grados arriba y
abajo, una vez que esté precalentado. Las tenemos en el horno entre
15 a 20 minutos, según el horno. Se sacan y se dejan enfriar. Luego se guardan en un recipiente hermético para conservarlas.
Observaciones:
Antiguamente había un molde para hacer
las galletas.
La canela es opcional y la mantequilla
antes no se echaba, pero yo si lo hago porque salen más suaves.
La vainilla también es opcional y al
gusto.
El azúcar al gusto si quieres más o menos.